Lo mejor, desde siempre son y serán los abrazos, los abrazos con cariño, de esos que sombran las palabras, de esos en los que te contienes las lágrimas por la emoción.
Cuanto más tiempo tengo lejos a las personas que quiero más me gusta la distancia, esta consigue que te des cuenta del hueco que dejan en tu corazón, de lo importante que es que esté lleno y como una canción puede casi trasladar a esa vida al lado tuyo, aunque sea sólo por medio segundo.
También están las llamadas y las risas por las anécdotas vividas separadas, y está el amor, si, ese que reina al final de cada conversación y las ganas de seguir hablando aunque sea del aire.
Have I told you lately? We are friends throgh this trip
Y puede que al final la felicidad se encuentre en los reencuentros,
en las sorpresas
y en los fines de semana perfectos.